A fines de los noventa solíamos reunirnos con Luis Culshaw para divagar y hacer músicas. En el 99 esbocé una letra de tango, a partir de una anécdota vivida. En el 2000 se la pasé a Luis para que compusiera una música. Encontré el primer ensayo, el cual fue una de las últimas veces que lo vi, ya que luego viajo a España. En el 2001 recibo un cassette que me enviara desde Europa, contando anécdotas varias y para mi sorpresa, aún continuaba dándole vueltas al tango. Otra maqueta sin terminar. Once años después las rescato del olvido, es un tango sin final.
Además encontré una grabación, compuesta a fines del 2001 o principios del 2002. "Malambo Inn" un experimento sobre una pista de bajo de Luis, a la que le agrego percusión, vibráfono y melódica.
Por los viejos tiempos.
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